Francisco González Santana, una vida dedicada a Dios, a la Iglesia y al servicio de la sociedad.

En 1930 nace, en Alconchel, Francisco González Santana, hijo de un sastre oliventino y de una bordadora de Elvas (Portugal). Antes de cumplir un año de edad, su familia se desplaza a Olivenza, siendo bautizado en la iglesia de Santa María Magdalena.

Hasta los 14 años estuvo en la escuela de su tía paterna, Dolores. Posteriormente comenzó a trabajar, sin olvidar una de sus grandes pasiones, la música, inquietud que venía de familia, aprendiendo solfeo y piano lo que le permitiría tañer el órgano con gran maestría, hasta tal punto que llegó a participar como organista en la película Los Santos Inocentes de Mario Camus en 1984. También formó parte de la centenaria banda de la Sociedad Cultural La Filarmónica.

Su relación con la Iglesia le viene de tiempos del sacerdote Dionisio Pinto Palma, de quien fue monaguillo. Colaboró codo con codo con el también sacerdote Luis Zambrano Blanco, siendo testigo del Milagro del Arroz, en 1949, e impartiendo clases a niños en la Escuela de San José, a la que da vida Don Luis. Desde entonces, su vinculación con las dos parroquias oliventinas ha sido continua. A Paco, que era como le gustaba le llamasen, se le considera persona clave en el resurgir de las cofradías de la Semana Santa oliventina.

El 1 de noviembre de 1968 comenzó a dirigir la Casa Tutelar de Menores Nuestra Señora de Guadalupe, donde crea talleres de forja y carpintería para enseñar un oficio a los niños y jóvenes internos.

En mayo de 1980 se celebra, la III Semana de Extremadura en la Escuela. Los profesores de los colegios de Olivenza se implican en la tarea de solicitar a padres de alumnos material para una exposición sobre costumbres y tradiciones para mostrar en el recinto del Castillo. El buen sabor de boca que dejó esta muestra hace que, en mayo del 1981, con motivo de la IV Semana de Extremadura en la Escuela, se haga una exposición a conciencia que sería el germen del actual Museo.

A finales de los años ochenta pasó a dirigir la Casa de la Cultura, Universidad Popular y Escuela de Música, de manera altruista.

En 1991 cobra vida su gran proyecto, el Museo Etnográfico Extremeño, al que Paco, como gran coleccionista, aportó el 80% de las piezas. Durante la inauguración del Museo, el 12 de julio de 1991, el entonces presidente de la Junta de Extremadura, don Juan Carlos Rodríguez Ibarra propone que le sea concedida la Medalla de Extremadura “… por su labor como promotor del Museo Etnográfico de Olivenza”. Cinco años después, el 30 de enero de 1996, el Excmo. Ayuntamiento de la localidad, en sesión plenaria, adoptó, por unanimidad el acuerdo de otorgarle el título de Hijo Predilecto de la localidad, en atención a su labor de recogida y salvaguarda del patrimonio etnográfico y cultural oliventino.

En enero de 2002 deja la dirección del Museo Etnográfico, siendo nombrado Director Honorífico en Consejo Rector de 25 de enero del año mencionado.

Durante la celebración de la 13ª Jornadas de Museología, celebradas en Mérida el 19 de noviembre de 2009, le es concedido el Premio de la Asociación Profesional de Museólogos de España.

Desde agosto de 2021, por motivos de salud, se encontraba en la Residencia y Hospital Santa Casa de Misericordia de Olivenza, Institución a la que mostró siempre enorme apego.

Nuestro más sincero agradecimiento a Paco por ese gran legado que le sobrevive, un legado que es necesario mantener.

PAZ PARA SUA ALMA

Horario de invierno

(1 de octubre-30 de abril):

Martes a viernes de 10:30 a 14:00 h. y de 16:00 a 19:00 h.

Sábados: de 10:00 a 14:15 y de 16:00 a 19:00 h.

Domingos: de 10:00 a 14:15 h.

Lunes: Cerrado

Horario de verano

(1 de mayo-30 de septiembre):

Martes a viernes de 10:30 a 14:00 h. y de 17:00 a 20:00 h.

Sábados: de 10:00 a 14:15 y de 17:00 a 20:00 h.

Domingos: de 10:00 a 14:15 h.

Lunes: Cerrado

Ubicación del museo

Plaza de Santa María, s/n. Apdo. de Correos 67 06100 Olivenza (Badajoz. España)